Cierto placer... (varias cosas)

Acaso no es indescriptible el placer ke dá leer a un hombre inteligente y sensible?
Porke a diario me voy topando en la net con comentarios inteligentes de mujeres, pero cuando me encuentro con algún comentario ke me sorprende y el autor es hombre, el placer es mayúsculo. Y cuando la sorpresa viene acompaña de una sonrisa, y porké no, de una carcajada, el placer suele multiplicarse sobre sí mismo.
Hombres como Junous (por dejar un ejemplo) hacen ke mujeres como yo sigamos teniendo esperanza en la raza humana. (O hacen ke una tenga ganas de procrear, whatever)

O capaz ke soy una calenchu nomás... kién sabe.

En otro orden de cosas les cuento ke estoy abocada a la tarea de darle forma (literal y manualmente) a diminutos personajes de porcelana fría ke estoy vendiendo con cierto éxito. Hoy la tarea se complica porke me han desafiado con la odisea de hacer una réplica exacta de Bob Esponja; y sólo porke soy muy cabezona he aceptado llevar a cabo tamaña odisea. Y a ver con ké se ponen, ke más kieren, una estatua de Olmedo en tamaño natural? Se las hago. Un busto de Zamora en plena exhibición de su perturbador escote para decorar el baño y así ayudar a los movimientos naturales ke allí se llevan a cabo? También se los hago, ké tanto.

(En breve dejaré fotos de mis simpáticas creaciones)

En el orden de cosas de siempre, mi vida sigue siendo un desastre: mi viejo hoy por hoy está revolviendo la casa buscando la denuncia ke hizo por el acontecimiento desafortunado sito en el estacionamiento de Coto, supone ke ese papelucho puede sacarlo en un futuro próximo de la miseria económica y moral en la ke se encuentra. Al comentar este hecho mi madre me dijo: "En vez de ir a trabajar ocupa la cabeza pensando ese tipo de boludeces" A lo ke le respondí: "Una vez ke tiene un proyecto vos te kejás" E inmediatamente me atajé la cachetada mientras aprovechaba el movimiento de cabeza para saludar al verdulero (sí, la cachetada me la propinó en plena avenida, y mientras intentaba embocarme saludaba al verdulero ella también) Volviendo a mi viejo: escondió el papel de la denuncia para ke nadie se lo tire y ahora no hay Cristo ke lo encuentre. (Y después me preguntan a kién salgo yo, con esa costumbre de autoboicotearme)

Bueno, supongo ke hasta ahí vamos. Nos estamos viendo.